Usemos los dedos de nuestras manos para enumerar 5 verdades del Evangelio del Señor.
DEDO PULGAR
Este dedo es opuesto y/o diferente en relación con los demás, es el más fuerte y sirve para demostrar aceptación: nos recuerda: LA VERDAD DEL AMOR DE DIOS.
38 Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, 39 ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro. Romanos 8: 38-39.
ACEPTEMOS SU AMOR.
DEDO ÍNDICE
Es el dedo más expresivo y dinámico, se usa para señalar, presionar y enfatizar, nos recuerda: LA VERDAD DE NUESTRO PECADO.
Porque yo reconozco mis rebeliones y mi pecado está siempre delante de mí. Salmo 51:3 Somos pecadores y por lo tanto, separados de Dios.
RECONOZCAMOS NUESTRO PECADO..
DEDO MEDIO
Se llama de acuerdo con su posición entre los demás, regularmente es el más grande y nos recuerda: LA VERDAD DE LA MEDIACIÓN DEL SEÑOR.
Porque hay un solo Dios y un solo mediador entre Dios y los hombres. Jesucristo hombre. 1 Timoteo 2:5 El Señor Jesús es el Intercesor, El Mediador, El Puente para llevarnos a Dios.
ACEPTEMOS SU INTERCESIÓN A NUESTRO FAVOR.
DEDO ANULAR
También se llama el dedo del corazón o del amor y se usa para establecer pactos como el del matrimonio y nos recuerda: LA VERDAD DEL PACTO DE LA FE.
24 Y les dijo: Esto es mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada. 25 De cierto os digo que no beberé más del fruto de vid, hasta aquel día en que lo beba de nuevo en el reino de Dios. Marcos 14:24-25
El pacto es un testamento en donde Él nos hereda perdón y vida eterna si lo aceptamos.
ACEPTEMOS SU PERDÓN CREYENDO EN ÉL CON TODO EL CORAZÓN.
DEDO MEÑIQUE
Es el dedo más pequeño y aparentemente no es muy útil y nos recuerda: LA VERDAD DE LA SENCILLEZ DE LA CONVERSIÓN.
18 Y dijo: ¿A qué es semejante el reino de Dios y con qué lo compararé? 19 Es semejante al grano de mostaza que un hombre tomó y sembró en su huerto; y creció, y se hizo árbol grande, y las aves del cielo anidaron en sus ramas. Lucas 13: 18-19
Sólo creer, sólo hacer una oración de arrepentimiento y fe parece sencillo, pero es una experiencia extraordinaria que nos integra al reino de Cristo.
HAGAMOS UNA ORACIÓN A DIOS ENTREGANDO NUESTRA VIDA.